Pepe Gimeno. Gráfica Creciente

Entre los clientes de Pepe Gimeno (1951) figuran empresas de la talla de Roca, Lladró o la Fundación Bancaja. En la actualidad dirige el estudio valenciano Gimeno Gràfic y ha sido galardonado con el Premio Nacional de Diseño 2020 en reconocimiento a sus 50 años de trayectoria profesional.

Su estilo ha sabido unir emoción y función con una elegancia que permea su extensísima cartera de trabajos, desde identidad gráfica corporativa a packaging, diseño expositivo y proyectos de señalización. Sin olvidar su vocación por el diseño tipográfico y la tipografía, una de sus señas de identidad más características.

Aparte de su amplio trabajo gráfico, acompañado de los procesos de una selección de casos como la tipografía FF Pepe o los envases de arroz Sivaris, esta exposición retrospectiva muestra la investigación plástica en forma de esculturas y collages de un autor de referencia que cuenta con obra en la colección del IVAM y en la de Merrill C. Berman (Nueva York).

No es habitual poder decir de alguien que atesora cincuenta años de trayectoria y que es pionero, referente y memoria viva de la historia del diseño gráfico de las últimas décadas en España. Pepe Gimeno (1951, Valencia) cumple ambas premisas.

Es uno de los padres del diseño gráfico español, uno de los profesionales que han marcado y siguen marcando el devenir del sector. El impacto de sus trabajos ha trascendido sectores, instituciones y fronteras. Y ha superado con nota el paso del tiempo, manteniéndose tan vigente, al margen de modas y de cambios sociales, como el primer día.

Su estilo ha sabido unir emoción y función con una elegancia que permea su extensísima cartera de trabajos, desde identidad gráfica corporativa a packaging, diseño expositivo y proyectos de señalización. Sin olvidar su vocación por el diseño tipográfico y la tipografía, una de sus señas de identidad más características. No en vano la tipografía FF Pepe obtuvo en 2001 el máximo galardón del mundo tipográfico, que concede el Type Directors Club de Nueva York. A los pocos meses la fundición tipográfica alemana Font Font la incluía en su catálogo para distribuirla internacionalmente.

Si de premios se trata, Pepe Gimeno ha sido reconocido en los últimos años con importantes premios a toda su trayectoria, el de la Asociación de Diseñadores de la Comunitat Valenciana y el Premio Gràffica en 2017 y el Premio Nacional de Diseño 2020 que concede el Ministerio de Ciencia e Innovación. Sus proyectos han recibido más de medio centenar de distinciones nacionales e internacionales, entre ellos el Platinum Award y el Golden Award del Graphis Poster, el Certificado de Excelencia Tipográfica de la International Society of Typographic Designers (ISTD) del Reino Unido, y el Worldstar Award for Packaging Excellence, entre otros.

El Type Directors Club le ha concedido en cinco ocasiones el Comunication Design Award por trabajos como el cartel de Grafía Callada, los carteles de cDIM y Nude, el envase de Sivaris, el catálogo Diario de un Náufrago y el cartel Vivan los Toros.

Pero sobre todo, si en un aspecto ha contribuido al progreso del diseño español, ha sido en acercar ese diseño a los ciudadanos en su día a día, en las instituciones que les representan, en los museos que visitan e incluso en el transporte público que utilizan.

Uno de los hitos más destacados de su carrera fue ganar el concurso restringido para crear la imagen de la Presidencia Española de la Unión Europea en 2002. Pepe Gimeno diseñó una marca que fue icono de España en todo el mundo.

A lo largo de su carrera, Pepe Gimeno ha desarrollado con sus clientes relaciones de colaboración y complicidad que se han prolongado durante décadas. Así ha ocurrido, por ejemplo, con la Feria del Mueble de Valencia o con la compañía Roca.

A la faceta del Pepe Gimeno diseñador se suman otras. La de mentor, conferenciante, articulista y artista plástico. Su obra experimental le convirtió en uno de los primeros diseñadores en exponer individualmente en un museo de arte. Fue en el Institut Valencià d’Art Modern (IVAM) en 2004 con la obra Grafía Callada, que ha sido expuesta también en Miami, Chicago y Nueva York. Una colección de piezas realizada en su totalidad con materiales de desecho encontrados en la playa y cuya finalidad era construir un libro en el que no se pudiera realizar una lectura verbal. A ese proyecto le han seguido otros como Diario de un Náufrago, Manifiesto Emocional, Versus, Desde mi ventana y Grafía Cantada.

Las obras de Pepe Gimeno, tanto las artísticas como las de diseño, forman parte del fondo de museos como el IVAM, el Merril C. Berman de Nueva York y el Museu del Disseny de Barcelona y han sido mostradas en decenas de exposiciones.